Max Ávila
Cd. Victoria, Tamaulipas.- Consumado el proceso interno de Morena de cuyo resultado es la virtual, mejor dicho la irreversible candidatura de Américo Villarreal Anaya, se aprecia en Tamaulipas un nuevo escenario rumbo a las elecciones de junio próximo.
Habrá digo yo, reacomodo de grupos en obediencia a intereses muy concretos, al margen de la consideración ciudadana respecto de la preferencia por tal o cual partido, y desde luego del abanderado en competencia por la gubernatura estatal. Sea que la actitud política en los distintos niveles ha de ser diferente. No será unilateral como hasta ahora, surgida la opción en la persona del médico victorense de quien no es secreto, cuenta con cierta ventaja por el prestigio de su padre calificado como uno de los mejores gobernadores. Américo hijo sin embargo, escribe su propia historia y hasta ahora lo ha hecho bien.
Los casi seis meses que se avecinan, viviremos en estado de inquietud y participación, dado que los tamaulipecos queremos lo mejor para la entidad. Y esto ha de decidirse solo a través del voto, es decir, en forma civilizada, pacífica y sobre todo, democrática. Es el mejor de los deseos para el 2022.
“DONDE APRIETA NO CHORREA”
El INE tuvo que doblar las rodillas ante la decisión del Poder Judicial sobre la consulta de revocación de mandato. Así Lorenzo Córdova y quienes pretendían atentar contra la democracia, quedan obligados a organizar este ejercicio que sin duda, marcará rumbo sobre uno de los propósitos más importantes de la Cuarta Transformación.
Nada de berrinches ni caprichitos de la burocracia de cuello blanco que solo piensa y actúa en función del dinero, simplemente hacer valer el derecho ciudadano de acotar el poder cuando éste asume características que contradicen los principios e ideales contenidos en la Constitución General de la República.
El asunto es que la mayoría de los consejeros del INE tendrán que ajustarse a los mil 503 millones de pesos aprobados en el presupuesto respectivo y olvidarse de los 5 mil millones exigidos para realizar una tarea que al contrario de condicionar, deben impulsar, celebrar y alentar, por la sencilla razón de que está de por medio la voluntad popular.
Ya decíamos que Córdova y su grupo en correspondencia a intereses neoliberales, intentaron ocultar el apoyo mayoritario de que goza AMLO pretextando falta de recursos lo cual equivale a ponerle precio a la democracia. No olvidéis que durante los anteriores gobiernos el INE fue uno de los organismos más apapachados. Tanto que algunos resultados electorales fueron severamente cuestionados debido a la sospecha de falta de credibilidad o de claridad, que pa’l caso es lo mismo.
Mientras tanto para no dejar duda del interés por la consulta del próximo diez de abril, el grupo denominado “Para que siga la democracia”, hizo llegar al INE millones de firmas que apoyan el procedimiento, muy por encima de las exigidas para ser considerado legal. En cuanto al señorito Lorenzo Córdova no le queda de otra que cooperar aflojando el cuerpecito, o atenerse a las consecuencias. Dicho sea sin ganas de ofender, nomás pa’ que entienda “que donde aprieta no chorrea”.
SUCEDE QUE
De risa la presunta “rebeldía” de Maki Ortiz, respecto del resultado en Morena…no dudéis que haya sido consejo de Mario Delgado.
Y hasta la próxima.
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