4T, gira artística del gabinete

Max Ávila

Cd. Victoria, Tamaulipas.- Como espectáculo fue impresionante. Por algunas horas desfilaron estrellas políticas de moda muy al estilo de aquellas caravanas de artistas que llegaban sorprendiendo la placidez pueblerina para luego desaparecer tragadas por el viento y la distancia. Uno a uno los funcionarios fueron aplaudidos en la primera reunión que sirvió de marco al plan de apoyo a Tamaulipas alimentado en mayor medida por el discurso fácil y la promesa condicionada por un régimen al que se le agota el tiempo y también los recursos.

Hombres y mujeres del gabinete de AMLO cumplieron la instrucción de hacer presencia en nuestra entidad que, en su orfandad, demandó y obtuvo calorcito federal después de padecer la pesadilla neoliberal no menos de 24 años. De lo que se dijo nada fue extraordinario. Ni siquiera lo relativo a las aduanas, ni a la refinería Madero, al bienestar, incluso ni a la disminución de delitos, dato este último que aportado por el secretario de la Defensa Nacional alegró al titular del anterior régimen que así lo hizo saber en su cuenta personal de redes sacudiendo al mundillo oficial.

En dicha reunión se olvidó la pobreza del altiplano, las zonas marginadas de los centros urbanos y por supuesto la carencia de los servicios básicos en la mayor parte del estado. En tanto las palabras de bienvenida fueron de agradecimiento, como si habitáramos el paraíso. Y no en la promiscuidad imposible de ocultar en el lenguaje de la realidad.

Datos, cifras y presunciones de avance y desarrollo que poco o nada significan para la paisanada en condiciones difíciles, que, dicho sea, no cayó en la trampa distractora de la farándula política cuando ni siquiera alteró su cotidianeidad en la búsqueda del pan nuestro de cada día. Aquí estuvieron los protagonistas republicanos y la respuesta popular fue ignorar su presencia. Y es que la desconfianza nace y se hace impulsada por la demagogia y el manejo dudoso de las circunstancias.

La presencia de AMLO y su gabinete fue algo parecido a la función artística que disfrutan los soldados en guerra, sobre todo los gringos, quienes saben que después pueden morir en cualquier momento. Guardadas las proporciones, estamos ciertos que el plan anunciado será exitoso en la medida en que lo permitan otras prioridades impostergables para el supremo gobierno. Tamaulipas, señoras, señores, solo es parte de México y la atención a su problemática es relativa, con todo y que, por la publicidad desplegada pareciera que recursos federales se volcarían a lo largo y ancho del estado. Así lo creímos al principio en una actitud egoísta y hasta grosera con otras entidades.

Toda comparación es odiosa, sin embargo, en este caso registra un estilo de gobernar exitoso antes de que apareciera el neoliberalismo. Se trata de aquellos viejos políticos que al llegar a una comunidad en problemas ya llevaban soluciones. Nada de promesas, ni espectáculos impresionistas. En público entregaban recursos, firmaban acuerdos de aplicación inmediata, radicaban funcionarios para el cumplimento de tareas, como la ocasión en que mi general Lázaro Cárdenas recibió una comisión de ciudadanos de Xicoténcatl solicitantes de una presa. Respondió: “en una semana estoy con ustedes” y estuvo, no solo, sino acompañado de ingenieros y la maquinaria necesaria para iniciar y concluir la obra. Lo contó al columnista una sobreviviente del grupo, quien agregó: “llegaron casi de madrugada despertando a todo el pueblo, pero con tanta alegría que, de inmediato preparamos almuerzos y café para los visitantes”.

Nos preguntamos, ¿y ahora qué trajeron los funcionarios de la 4T convertidos en artistas de cine, teatro, radio y TV? Tal vez promesas tan lejanas como la esperanza.

EJÉRCITO, SIGUE LA POLÉMICA

Y nada que concluye el asunto del ejército en las calles hasta el 28. Resulta que el supremo gobierno tiene problemas para cumplimentar el número de legislaturas locales que han de aprobar lo que ya hizo el congreso de la Unión. Y es que hay resistencia en algunos estados como Tamaulipas, donde la mayoría panista se declara lista para rechazar lo que corresponde a su condición opositora.

Es razón para que el secretario Adán Augusto López llame a algunos gobernadores “¡hipócritas!” ya que sin recato solicitan apoyo de las fuerzas armadas cuando lo necesitan y ahora que se trata de la seguridad ciudadana, niegan el voto de sus diputados lo cual retrasa que dicho acuerdo se convierta en institucional, para lo cual, como sabéis, es necesaria la aprobación de diecisiete congresos, cuando menos.

Algunos de los señalados ya le respondieron a don Augusto y no fue en términos amables, por el contrario. Lo cierto es que la participación del ejército en vigilancia y prevención de delitos del orden común no avanza y ahora menos con la presión del titular de Gobernación quien no escatima calificativos hacia los adversarios de la 4T. Total, que al columnista no le faltan mortificaciones.

SUCEDE QUE

Selectiva, manipulada, de mero trámite, limitada y condicionada para no preguntar sobre asuntos “tóxicos” para el estado y sus actuales autoridades o del anterior régimen. Así fue calificada la entrevista de AMLO con los medios el miércoles anterior en ciudad Victoria…”pos que pena, tan bien que íbanos”, como diría el ranchero.

Y hasta la próxima.