Legislatura de mal en peor

Clemente Castro González

Cd. Victoria, Tamaulipas.- Pese a que conservan el mando en el Congreso del Estado, la bancada de Morena sigue debiéndole a los tamaulipecos que votaron para que se diera un cambio en ese poder  ya que, en su momento, las y los legisladores panistas  se dedicaron a levantar la mano, según se los ordenaba el ejecutivo estatal, aunque se atentara contra los intereses de la población.

Ahora los diputados morenistas que lideran la 65 Legislatura, con el respaldo de sus aliados, no tienen la bota en el cuello como si sucedió durante el mandato cabecista con los representantes populares del albiceleste. Es decir, cuentan con margen de maniobra para demostrar que por algo están en el cargo.

El problema es que se les nota extraviados. A veces pareciera que, como dice la canción, navegan sin rumbo fijo ni dirección.

Llegaron al extremo de perder en la mesa la Junta de Coordinación Política y si no ha sido porque inventaron la figura de Junta de Gobierno la bancada panista les estaría “sacando la lengua”.

De hecho ese asunto esta en litigio y en una de esas les vuelven a dar un susto ya que los del albiceleste quieren regresar por sus fueros para seguir sirviéndole al  patrón.

La verdad es que la bancada morenista, con la diputada ÚRSULA SALAZAR MOJICA al frente, no da una. Es evidente que le falta preparación, experiencia y liderazgo.

Porque si bien cuentan con mayoría simple les falta alcanzar la mayoría absoluta, que solo tendrán si logran sumar 24 diputadas y diputados.

Pero esto parece casi imposible en los tiempos actuales da la impresión que así se la van a llevar hasta que entre al quite  la 66 Legislatura.

Significa que no podrán dar para abajo a los cambios constitucionales que dejó el anterior Gobierno del PAN a fin de  tener influencia en la entidad y, de ser posible, promover el caos.

Hace poco fuimos testigos de los desaires y burlas que hicieron el Auditor Superior del Estado, JORGE ESPINO ASCANIO y el Fiscal Anticorrupción, RAÚL RAMIREZ CASTAÑEDA.

Cada uno se parapetó en su trinchera y terminaron imponiéndose al legislativo con el argumento de que  dirigen entes autónomos.

ESPINO ASCANIO se dio el lujo de jugarles el dedo en la boca a los legisladores y en lo específico a ÚRSULA, a la que no entregó la documentación de cuentas públicas que le fue requerida, en tiempo y forma.

Hasta lo hicieron darse sus vueltas al Congreso para escuchar señalamientos de los legisladores pero el personaje del cabecismo se salió con la suya.

Lo mismo ha sucedió con RAMÍREZ CASTAÑEDA, el cual trae su blindaje legal a través de la figura del amparo.

Es decir, la embestida de SALAZAR MOJICA terminó siendo un desastre y los sujetos en mención gozan de cabal salud.

Flaco favor le hizo a la causa que representa. Y es que si le instruyeron para que les diera el apriete a los cabecistas ella debido haber previsto el escenario adverso que, al fin de cuentas, sucedió.

¿Para qué llevar a cabo acciones en contra de Don JORGE y Don RAÚL si no se cuenta con la fortaleza y mecanismos a efecto de meterlos al redil? ¿A quién atribuirle esa derrota debido  a la errática estrategia utilizada?

A propósito, la diputada tampoco tiene argumentos ni mecanismos para presionar al panista LUIS CANTÚ GALVÁN,  con el objetivo de que acuda a las reuniones de la Comisión Permanente, en donde aparece en calidad de vocal.

Resulta  que al “Cachorro” le vale poco lo que se haga o deje de hacer en esa instancia. Igual nada le importan los amagos, en el sentido de que le podrían meter tijera a sus percepciones por faltista.

Sin duda lo que hace el diputado es una burla y falta de respeto a lo que representa. A lo mejor no se representa ni él y  no acude a la Permanente.

El caso es que la diputada SALAZAR MOJICA puede tener sus errores de cálculo político y criticas a su liderazgo pero no se podrá negar lo de su esfuerzo por figurar.

Lo acabamos de constatar con lo de la presentación de una iniciativa de ley que se enfoca a considerar el robo en vehículos motorizados, en  particular las motocicletas, como agravante  para endurecer las penalidades al infractor.

De lo que se trata, de acuerdo a la argumentación, es proteger la seguridad patrimonial de los tamaulipecos.

La diputada pretende que quede plasmado en el código penal dicho agravante.

Por supuesto que no estamos en contra que se aplique la ley al que cometa ilícitos. Pero, ¿la iniciativa señalada es parte de las prioridades del Congreso? Cierto que otros estados han legislado al respecto.

Habrá que ver las estadísticas para dimensionar la trascendencia de la iniciativa presentada.

A propósito del Congreso, se convocó a sesión extraordinaria para éste martes a las 13:00 horas.

AL CIERRE

El Alcalde de Matamoros, MARIO LÓPEZ HERNÁNDEZ, para sus amigos La Borrega, hizo movimientos en la estructura administrativa.

De los cambios realizados, llama la atención que mandara a Bienestar Social a una de sus principales corcholatas, entiéndase CARLOS BALLESTEROS GÀLVEZ, quien se desempeñaba en la Secretaría del Ayuntamiento.

Si las cosas marchan bien, de aquí a que se de la definición para la candidatura, CARLOS tendrá acceso directo a los beneficiarios de los programas sociales que se implementan desde la Presidencia.

Pero, ¿qué pasará si a CARLOS no le dan la candidatura a la Alcaldía?

La realidad es que La Borrega trae la estructura para ganar. Sin embargo, hay una jefatura política a la que deberá tomarse en cuenta.

De entrada parece buena la jugada  llevada a cabo. Porque si a LÓPEZ HERNÁNDEZ lo palomean para una diputación local o federal tendrá su respectivo respaldo en Bienestar Social.

El asunto es que será difícil que, si favorecen a La Borrega, le permitan meter mano para dejar su relevo.