Por Agencias
Ciudad de México.- Se reanudó en la sede alterna de Xicoténcatl la sesión del Senado para la discusión de la reforma judicial, que se había pospuesto por la irrupción en el recinto de Reforma e Insurgentes, de manifestantes que se oponen a ese proyecto legislativo que tiene como uno de sus puntos centrales la elección popular de jueces, magistrados y ministros, en medio de la confrontación entre Morena y la oposición.
De nuevo hubo una gritería, silbidos y abucheos, cuando el senador del PAN, Miguel Ángel Yunes Márquez, anunció que votará a favor de la reforma y reprochó a su partido la campaña de amenazas y de linchamiento en su contra.
Con ese voto, Morena logra la mayoría calificada, que requería para la aprobación de esa reforma propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
De forma sorpresiva, al reinicio de esta sesión vespertina, en la vieja casona de Xicoténcatl, Yunes Márquez, quien por la mañana, en la primera sesión presentó una solicitud para ausentarse del cargo por tiempo indefinido, dio marcha atrás y anunció su regreso a su escaño.
Ello, pese a que su padre, Miguel Ángel, Yunes Linares, ya había rendido protesta en esa primera sesión matutina y se había confrontado con los panistas.
El senador Yunes Márquez presentó un voto particular en el que señala que han tratado de obligarlo a que apruebe una reforma, que ni siquiera han discutido en la bancada blanquiazul, simplemente por ir contra la mayoría.
Esta mayoría, agregó “representa a los mexicanos, nos guste o no”, entre nuevos gritos de “traidor, traidor”.
Cuando el alboroto cesó, Yunes Márquez agregó que no está de acuerdo en doblarse con imposiciones, y tampoco es un traidor. Lamentó esa narrativa que se ha tratado de imponer desde Acción Nacional, “que se pretende clasificarnos como ángeles o demonios, como héroes o traidores, por el sentido de nuestro voto”.
Agregó que la reforma judicial propuesta no es la mejor, pero en las leyes secundarias se tendrá la posibilidad de enriquecerla.
El presidente de la mesa directiva, Gerardo Fernández Noroña, llamó varias veces al orden, porque el salón se convirtió en un griterío. De un lado, los panistas llamándolo, traidor, traidor, y por el otro Morena, tratando de callarlos con los gritos de «México, México».
Durante la sesión, el coordinador de MC, Clemente Castañeda insistió en que el senador de su bancada, Daniel Barreda sigue desaparecido y no está claro si hay o no órdenes de aprehensión en contra de su padre.
El presidente de la mesa directiva, Gerardo Fernández Noroña le señaló que tanto el gobierno de Campeche como la fiscalía de ese estado, ya reiteraron que no hay ninguna orden de aprehensión contra el padre del legislador, que no asistió a esta sesión.
La discusión, en lo general inició apenas, por lo que es un hecho que el debate se prolongará hasta la madrugada. (Andrea Becerril y Georgina Saldierna/La Jornada).
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