Pues no que estaba muerto

Marco A. Vázquez                               

Cd. Victoria, Tamaulipas.- El ex candidato a gobernador del Estado, el Diputado federal Baltazar Hinojosa Ochoa está más vivo que nunca y sus posibilidades de ser candidato del PRI al Senado aumentan todos los días.

Si eran fuertes sus amarres con José Antonio Meade de candidato a la Presidencia de la República hoy lo son más al anunciarse que el ya ex Secretario de Educación, Aurelio Nuño, ese que no saber “ler”, será el coordinador de la campaña del PRI, ambos son sus amigos o por lo menos eso presumen propios y extraños.

Obvio es que Baltazar tiene desventajas, la primera es que la dirigencia y patrocinadores del PRI Tamaulipas no lo quieren y difícilmente trabajarían para él, es más, es probable que ya lo estén bloqueando desde hace mucho.

Otro punto en contra de Baltazar es el futuro de Tomás Yarrington, su amigo, su compadre, quien lo hizo político de competencia en urnas cuando se lo trajo de Coahuila con la intención de hacerlo su sucesor y lo habría logrado si no fuera porque sus enemigos políticos lo investigaron hasta encontrar su acta de nacimiento, la misma decía que nació en Estados Unidos, ¿qué tiene que ver?, pues que es probable que por esas fechas lo estén extraditando a Estados Unidos y el escándalo en torno al ex gobernador y sus amigos se incremente y le haga daño a su hipotética campaña.

También hay muchos tricolores dolidos con Baltazar, lo acusan de haberlos abandonado después de que perdió, de cruzarse de brazos y no hacer acuerdos para buscarles acomodo para que no sufrieran penurias sin empleos o sin contratos que les permitieran continuar sus vidas sin sobresaltos.

Por supuesto, la elección que viene no se trata de amigos o enemigos, para el PRI será buscar candidatos que les representen un mínimo de votos en las urnas y Baltazar para eso si tiene capacidad, más ahora que no tendrá a un Egidio que le haga sombra.

Mire, los fríos números le dan al matamorense la razón, logró más de 500 mil votos con todo y que el gobierno de Egidio tenía muy enojados a los tamaulipecos, los obtuvo con todo y que los ahora Diputados federales que compitieron con el por la candidatura fingieron demencia y se escondieron para no trabajar a su favor, con todo y que el rechazo al PRI era mayor al 60 por ciento.

Y se preguntarán, ¿pues no que estaba muerto?, ahí tiene respuestas, ahora, tampoco piense que están muy vivos que digamos, los del tricolor están destrozándose entre ellos y al final quien sabe si quien resulte el ganador del pleito interno vaya a tener la capacidad de hacer una campaña constitucional que sea exitosa, vaya, que por lo menos no batalle para obtener el segundo lugar.

En otras cosas… Tema aparte, importante, es un boletín emitido desde la Secretaria de Salud donde se anuncia una reforma administrativa que a partir de la fecha obligará a evaluar cada programa y a cada titular o empleado de ese dependencia con el objetivo de cambiar lo que se deba cambiar.

La reforma fue promovida por el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca para garantizar niveles óptimos de desempeño y la profesionalización del servicio público.

Fue la Secretaria de Salud, Gloria Molina, quien se pronunció a favor de evaluar y dar seguimiento continuo a los indicadores y resultados de los programas, así como de los servidores públicos, de acuerdo con sus funciones y capacidades.

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