Por José Gregorio Aguilar
Ciudad Victoria, Tamaulipas.- Los zacatales y matorrales secos que dejaron las heladas registradas en el mes de diciembre se han convertido en material de combustión para provocar incendios, al grado tal que se están registrando un promedio de 10 siniestros al día, informó el encargado de Protección Civil Municipal Rubén Valero Castillo.
Precisó que el 90 por ciento de estos siniestros ocurrieron en zacatales y matorrales, los que debido a la acción de las heladas se convirtieron en material de combustión.
Es principalmente en las orillas y terrenos baldíos donde más se han presentado esos incendios, los que en muchas ocasiones son provocados por la quema de basura que hace la gente, a veces de manera irresponsable, comentó.
“La verdad se nos fue muy alto el índice, sí son 10 por día y de esos el 90 por ciento es puro zacatal; atribuimos ese incremento al clima, a las bajas temperaturas que secaron todo y eso es propenso a combustión”.
Por ello exhortó de nueva cuenta a la población en general a que evite quemar basura y arrojar colillas de cigarros en el suelo, sobre todo cerca de donde hay pasto, pues una sola chispa basta para que se genere el fuego el cual y gracias a la acción del viento puede tomar grandes dimensiones.
“Principalmente los servicios que hemos atendido han sido en las orillas de la ciudad y en terrenos baldíos, cualquier colilla de cigarro que tiren, cualquier quema de basura que se salga de control ahí surge el problema”.
En cuanto a la problemática de incendios en el relleno sanitario, el encargado de Protección Civil en el Municipio dijo que ya se reunió con el director de Limpieza Pública, Benito García Coronado, con quien comparte la preocupación por instrumentar medidas preventivas.
“Ya estamos en pláticas con Benito García para hacer un plan porque si es desgastante tanto para ellos como para nosotros; cualquier vientecito que se viene se nos prende el relleno sanitario y tenemos que tomar medidas de precaución y retomar el tema porque no podemos estar desgastándonos”, expresó.
Lo primero es ver cómo está la situación del terreno, evaluar los puntos rojos y proceder a efectuar limpieza con maquinaria y posteriormente tomar una decisión, que podría ser la de instalar una caseta de seguridad.
Planteó la posibilidad de que la gente que ahí labora vaya removiendo la basura con maquinaria y personal de Protección Civil apoye echándole agua, porque parte del problema radica en que debajo de la basura hay cenizas y residuos de materiales que permanecen encendidos de siniestros anteriores y viene un airecito y vuelve a prender.
Discussion about this post