Por Agencias
Villahermosa, Tabasco.-La Fiscalía General del Estado de Tabasco (FGE) informó la tarde de este domingo que aumentó de cinco a siete el número de víctimas del ataque registrado en el bar clandestino “El Azul”, que funcionaba de manera irregular en la colonia Tamulté de las Barrancas en Villahermosa.
Los recientes fallecidos figuraban entre los siete heridos que dejó en un principio el homicidio múltiple, donde aún se encuentran convalecientes en hospitales otras cinco personas que están con lesiones producidas por arma de fuego tras el hecho violento ocurrido la noche de este sábado 4 de enero y su estado de salud es considerado por las autoridades de pronóstico reservado.
En su comunicado la FGE explicó que ya iniciaron las investigaciones correspondientes a la vez de mencionar que actuarán con legalidad e imparcialidad en el desarrollo de las indagatorias para esclarecer los hechos.
Por su parte el Gabinete de Seguridad federal informó que entró a investigar junto con las autoridades locales el ataque armado ocurrido anoche en dicho bar.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), que coordina a las instituciones federales de seguridad, informó que ya colaboran con las autoridades locales para el esclarecimiento de los hechos, “para no permitir que este lamentable hecho quede impune”.
“El Gabinete de Seguridad Federal se encuentran en coordinación con autoridades de seguridad y procuración de justicia del Estado, para esclarecer los hechos”, informó el titular de la SSPC, Omar García Harfuch, en su cuenta de X.
La SSPC aseguró que su personal ya mantiene comunicación con la Fiscalía General del Estado de Tabasco y ha puesto a disposición del estado las capacidades del Centro Nacional de Inteligencia y la Subsecretaría de Investigación para coadyuvar en el desarrollo de las investigaciones.
También ya realizan el análisis de las grabaciones de cámaras de videovigilancia, mientras que elementos de las autoridades estatales y federales han desplegado patrullajes coordinados para localizar y detener a los responsables. (Iván Evair Saldaña y César Arellano/La Jornada).
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