Al comprar un colchon queen size o cualquier otro, es muy importante conocer su calidad y para ello es necesario tener en cuenta las características que deben tener, si hay colchones para diferentes edades, cual es el que se adapta más a tus gustos y necesidades, etc.
Según estudios las personas cambian de colchón una vez cada seis años, cuando lo más recomendable es cambiarlo cada ocho, nueve o diez como máximo.
Descansar sobre un buen colchón es indispensable para poder tener un buen descanso, y ayuda a tener una buena salud, fortalece el sistema inmunitario, el sistema nervioso, mejora la circulación sanguínea, tiene beneficios en el aparato locomotor, el corazón, el cerebro, el metabolismo, los ojos y la piel.
¿Cuándo cambiar de colchón?
Si al despertar te duelen los músculos o los sientes tensos es que ya necesitas cambiar de colchón, recuerda que lo importante no es dormir más o menos horas, sino lo profundo y reparador que sea el sueño.
Un sueño sin interrupciones, es muy importante para despertar renovado a la mañana siguiente.
Un dato muy importante es que más de un tercio de tu vida la pasas en el colchón así que, tendrás que elegir uno adecuado a tus condiciones, a continuación te diremos algunos tips para saber si un colchón es bueno.
Fíjate en sus características
- El colchón no debe ser ni muy blando ni muy rígido.
- Tiene que ser firme, para que sostenga tu cuerpo bien, pero sin llegar a ser muy incomodo.
- Debe ser homogéneo, no debe tener hundimientos ni huecos.
- Tiene que adaptarse a tu cuerpo y debe respetar tu curvatura natural, para que no lastime tu columna vertebral.
Verifica que tipo de colchón se adapta a tus necesidades
Hay variedad de materiales con los que son elaborados los colchones y cada uno se adapta a una necesidad, por ello es importante que conozcas los que hay disponibles:
- Los de espuma: pueden ser de muchos materiales, pero el más conocido es el de poliuretano, estos se pueden cortar para que se adapten a todo tipo de cuerpo y el precio es el más barato del mercado.
Lo que va en contra de estos colchones es que no regulan la temperatura.
- Los colchones de muelles: esos colchones transpiran mejor y no te dan problemas de humedad, por lo que son muy indicados para personas de sudoración excesiva, estos vienen de diferentes tipos:
- Muelles independientes: son núcleos con muchos muelles metálicos en vertical, se enlazan por hilos metálicos, son muy económicos.
- Muelles continuos: cuentan con un solo hilo metálico.
- Muelles embolsados: cuentan con cientos de muelles independientes metidos en sacos de tela individual y se unen por una sujeción fina, esta es una muy buena opción para camas matrimoniales, permiten una mayor independencia a cada persona, su precio es mayor.
- Colchones de látex: son los que se adaptan mejor a tu cuerpo que los de muelles, te ofrecen mayor firmeza y son más flexible, además aíslan muy bien el calor, vienen de diferentes tipos:
- Sintéticos: son de una formulación sintética de látex.
- Mezcla: llevan desde un 20% hasta un 50% de látex y combinan con espumas, son muy livianos y no producen casi humedad.
- Látex natural: el 85% es de látex y el resto de otros materiales.
También existen muchos colchones especiales como los ortopédicos para esas personas con una enfermedad, que pasan mucho tiempo acostados, estos no son recomendados para personas sanas.
¿Cómo elegir el colchón ideal para ti?
¿Duermes solo o acompañado? Como te dijimos anteriormente, hay colchones que te permiten mayor independencia a la hora de realizar movimientos.
Tu altura es otro factor muy importante a la hora de comprar un colchón, recuerda que tus pies nunca deben quedar fuera del colchón. Si tienes un peso muy elevado, el colchón debe ser muy firme, las personas delgadas deben usar colchones con mayor flexibilidad para repartir mejor su peso.
El clima de tu ciudad y tu temperatura corporal son muy importantes, los colchones de muelles son muy recomendables para esos lugares cálidos o para personas calurosas y los de látex son los mejores para esos lugares fríos o personas friolentas.
A la hora de elegir tu colchón, pruébalo sin complejos, tomate tú tiempo, no es solo sentarte un minuto y salir rápido, es necesario quedarse quieto unos minutos y sentir cómo actúan las capas del acolchado.
Asesórate muy bien con el asesor o el vendedor, para obtener el mejor y el más cómodo colchón de tu vida.
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